La captación de fondos es una necesidad recurrente en las entidades no lucrativas. A menudo se vive como un quebradero de cabeza o una urgencia, pero difícilmente se resuelve de forma eficaz si no se plantea desde una mirada estratégica y compartida dentro de la organización.
El primer paso es entender por qué necesitamos dinero. ¿Queremos iniciar un nuevo proyecto? ¿Debemos cubrir tensiones de tesorería? ¿Ofrecemos actividades que deben ser accesibles para todos? ¿Necesitamos adecuar un espacio? Cada caso implica una solución diferente: financiación puntual, aumento de la base social, campañas de fundraising, colaboraciones empresariales, etc.
Es clave identificar bien el reto para activar la herramienta adecuada. Y esto a menudo no se hace: muchas entidades buscan financiación allá donde no toca, o utilizan recursos sin una estrategia clara. Un mal diagnóstico lleva, inevitablemente, a una acción poco eficaz.
Por eso es necesario incorporar la captación como un área más de trabajo dentro de la organización, y hacerlo sin complejos. Las entidades no existen para hacer dinero, pero sin dinero no puede cumplir su misión. Hablar de recursos debe ser natural, transversal y asumido desde la dirección hasta el equipo técnico.
Es recomendable seguir algunos pasos:
- Analizar por qué se necesitan recursos.
- Implicar al máximo de personas dentro de la organización.
- Realizar una lluvia de ideas realista y adaptada al entorno.
- Inspirarse y formarse en buenas prácticas.
- Elaborar un plan y ponerlo en marcha.
- Evaluar sus resultados y ajustar cuando sea necesario.

La captación no sólo es una herramienta económica, sino también una herramienta de cultura organizativa. Nos obliga a escuchar, comunicar mejor, abrirnos al entorno y construir vínculos. Y si no pedimos, no captamos. Así de claro.
Y recuerda que si necesitas ayuda en tu estrategia de captación, puedes contar con CAUSES. ¡Envíanos un mail a info@causes.cat y hablemos!